BREVE RESEÑA
HISTÓRICA DE LA
COMUNIDAD YERBABUENA
La Yerbabuena es una comunidad del
Municipio Carrizal del Estado Miranda que limita con Barrio Bolívar, Barola, Lomas
de Urquía y Los Hidalgos. Según se desprende de la historia de la comunidad, una
de las primeras personas en llegar al sector fue la señora Carmen Esperanza
Pérez, quien vive en el sector la entrada desde hace aproximadamente 70 años; posteriormente se fueron integrando los vecinos
Juana Acosta, Víctor Corrales, Apolinar González, Brígida de Alfonso, Carmen
Bueno, Gilberto Zambrano, Daniel Marín, la familia Aguilar y la familia
Hernández; sucesivamente se fueron incorporando familias a los diferentes
sectores que hoy conforman ésta Comunidad. En principio, como casi todas las
comunidades de Carrizal, todo era verdor y entre su zoología abundaban
pecaríes, ardillas, rabipelados, culebras, guacharacas y otras aves. Evidentemente cuando empezó a crecer la
comunidad, carecían de todo tipo de servicios públicos. Tomaban el agua en el pozo que estaba en la
entrada, de un manantial que venía de la Escuela Granja y que surtía la
Yerbabuena y Carrizal; pero luego que empezaron a construir más casas el
manantial se contaminó. Posteriormente,
entre todos los habitantes hicieron un tanque y abrieron caminos, lograron la
instalación de los postes del alumbrado, la colocación de tuberías para aguas
negras que primero fueron de plástico y luego de cemento para cada sector. En
el sector La Montaña, el dueño de las parcelas, Sr. Zacarías Billota, instaló
una bomba hidroneumática y dio a cada dueño de parcela que vendía, el derecho a
estar conectado a dicha bomba; en el año
’77, el I.N.O.S., colocó un hidrante en la entrada para surtir a la comunidad.
Recuerdan los habitantes del sector,
las empanadas de la señora María Marín, las cuales se hicieron famosas en los
juegos de bolas criollas de “Las Estrellas de Miranda” y “Las Indias de
Miranda”, equipos liderados por la señora Cristina Serrano, quienes
representaron al Estado Miranda en varios juegos nacionales; También recuerdan
a Alberto Cartaya, “culebra”, muy querido en el barrio y recordado por ser
vendedor de helados. Hay una anécdota
que también rememoran los habitantes de la comunidad, y es que en el tiempo en
que era carretera de tierra, paralelo a las clavellinas, había mucho bambú, y
frente a la casa de Daniel Guevara, aparecía un espanto que no era más que
Emilio Alayón, quien con una gabardina negra de su papá, asustaba a los
transeúntes en horas nocturnas; también
se comentaba que la sayona ó la llorona bajaba montada en un caballo con
cadenas, pero que todos sabemos que esto forma parte de la imaginería popular.
Por ser una comunidad con zonas
montañosas, ha corrido con el riesgo de derrumbes, y gracias a la Gobernación del Estado, a la
Alcaldía y a las gestiones realizadas por vecinos del sector, tales como: María
Mujíca, Jesús González, Hilda Díaz, Omaira González, Rodulfo Vásquez, Elpidia
Hernández, Melia Licha, Carmen González, Lady Acosta, Zoraida Quero, Adelina
Aguilar, Carmen Bueno (difunta), entre muchos otros vecinos organizados y
unidos han logrado la solución de sus problemas y necesidades. Tal es el caso de la cancha múltiple de la
comunidad la cual fue lograda gracias al empeño y tesón de los vecinos.
Hoy día es una comunidad dividida en
seis sectores: Las Quintas, Los Aguilares, Los Campellos, La Escalera , El Tanque y La Montaña y subdividido en
sector Cariagua, ubicado en los Campellos; cuenta además con fábricas de
lámparas, coletos, vitrinas, galvanizados, textiles, ferretería, carpintería y
taller mecánico. ¡Congratulaciones a tan
pujante comunidad carrizalense!